Si me dices cómo...
	lo hago
PARA TRABAJAR EN COLECTIVO Propósito: Que el colectivo docente reconozca que la expresión oral favorece la organización del pensamiento en los alumnos a través de actividades que implican interpretar y expresar instrucciones para el trabajo cotidiano en el aula. Materiales: Libros del alumno. Recortable. Español. Segundo grado. Matemáticas. Cuarto grado. Ciencias Naturales. Sexto grado. Platiquen en el grupo de los juegos que solían jugar cuando eran niños, tanto aquellos que se realizaban de manera individual o sólo en ciertas temporadas como el trompo, el bebeleche o avión, el yo-yo; o bien los que jugaban en equipos como el futbol, los encantados, voleibol, etc. Comenten acerca de aquél que más les gustaba y por qué, así como las reglas para jugarlo. Si el número de maestros lo permite, armen equipos de 3 ó 4 elementos; si no, formen un círculo. Se requiere de un voluntario que elija en secreto uno de los juegos que se acaban de comentar y que dé a sus compañeros las instrucciones para jugarlo, considerando desde la postura corporal hasta el seguimiento de las reglas precisas. Traten de seguir las indicaciones y si el espacio es apropiado, desarróllenlo. Recuerden que quien dé las instrucciones no puede utilizar ningún objeto ni ilustración al respecto. Los demás pueden intervenir para aclarar el orden o la precisión de las indicaciones, así como utilizar algún objeto que le facilite la comprensión de éstas. Al finalizar este ejercicio contesten las siguientes preguntas y compártanlas en plenaria: Entendieron las instrucciones para participar en los distintos juegos? ¿Hubo claridad y precisión? ¿Qué dificultades tuvo el compañero que explicó el juego? Vamos a jugar ahora al “robot”. Se trata de elegir a un compañero para que sea el robot del equipo. Éste sólo podrá ejecutar órdenes claras y precisas sobre lo que debe de realizar. El resto del equipo deberá concertar acerca de las instrucciones que le darán, las cuales pueden ser acciones cotidianas como ponerse un cinturón, lavarse los dientes, preparar un café...; o bien relacionadas con acciones propias de una asignatura: construir un poliedro; hacer un recorrido en un plano cartesiano; reproducir un dibujo a escala; etc. El robot no obedece más que una indicación a la vez y ésta deberá ser secuenciada. Por ejemplo: “levanta la mano derecha hasta la altura de tus hombros, estírala hacia el frente, toma el cepillo, levanta la mano izquierda hasta la altura de los hombros, estírala al frente, toma la pasta”, etcétera. Comenten las dificultades de la experiencia y digan si estas actividades son favorables para el desarrollo de la expresión oral y si es posible su vinculación con otras asignaturas. Vean asimismo la pertinencia de ponerla en práctica con los alumnos de todos los grados. Analicen el siguiente recuadro y elaboren una conclusión grupal en donde incorporen a las ideas del texto la experiencia que acaban de vivir. Cuando los niños participan en la elaboración de reglas e instrucciones, además de discutir la secuencia de las ideas, llegan a percatarse de la necesidad de establecer acuerdos, ajustándose ellos mismos a las indicaciones que señalaron. Estructurar instrucciones representa una guía para el pensamiento de los niños puesto que exige la planeación del contenido del mensaje, considerando la situación, el propósito y el tema así como la regulación de la forma de expresión de lo que desea comunicar para conseguir el resultado deseado. Lean el propósito y el desarrollo de la sección Para trabajar en el aula. Organícense por ciclo y analicen las actividades que se proponen y hagan las adecuaciones necesarias de acuerdo al grado que cada uno de ustedes atiende, así como las asignaturas con las cuales pueden relacionar la actividad, el tema a tratar y el tiempo que consideren necesario para desarrollarla. Comenten acerca de las adecuaciones hechas y externen sus comentarios y sugerencias que les permita hacer más óptima su planificación para aplicarla.